9 de agosto de 2009

Salto al vacío...

Había llegado el momento que Lucas había estado esperando tanto tiempo. Se había decidido a saltar. Llevaba años vagando por aquellas infértiles tierras, sin saber a dónde le dirigían sus pasos, y sin conocer exactamente como había llegado hasta allí.

Lucas había perdido a su familia. Hacía años que no veía a sus padres. No comía, no dormía, estaba muerto en vida; llevaba recorriendo este lugar mucho tiempo, con el acantilado a tan sólo unos metros de él, y desafiando al destino cada día… pero hoy, iba a saltar.
Ya se hallaba al borde del precipicio, mientras sus blancas vestiduras ondeaban al viento, y sus pies descalzos flanqueaban el vacío que separa la vida y la muerte. Nada ni nadie iba a poder evitarlo.

A su espalda, una fría e inmensa niebla lo acechaba, como lo había estado haciendo todo este tiempo, persiguiéndolo por terrenos desiertos, teñidos de blancos y negros, y donde la única salida estaba al borde del abismo. Un salto al vacío.
Frente a él, yacía el mar. Un oscuro océano embravecido que rompía con fuerza contra las rocas que reposaban unos cien metros por debajo de sus pies. A lo lejos, el sol. La cálida y cegadora luz del sol, que se filtraba entre las nubes, como si un universo nuevo de colores y texturas se abriera paso ante lo que estaba a punto de suceder.

Había llegado la hora. No lo pensó dos veces. Era su único modo de pasar a mejor vida. Lucas se precipitó al vacío, y en pocos segundos todo terminó.

Abrió los ojos, y una blanquecina luz inundó sus pupilas. Lo primero que vio fue el tierno y dulce rostro de su madre, que le sonreía. A su lado, pudo discernir las facciones de su padre. Los dos lo abrazaron. Estaban distintos desde la última vez que los había visto. Y es que el tiempo pasa para todos, y Lucas también había cambiado en los cinco años que había estado en coma.
Por fin se había decidido a saltar al vacío. De la muerte a la vida. El salto definitivo.

22 comentarios:

Sitopon dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
shopgirl dijo...

Fallo, el anterior comentario era mio, pero ha habido un fallo de identificacion xDD

Vaya historia al revés, hasta la ultima palabra una no acierta a descubrir cual es el autentico final.

Unknown dijo...

¡Qué grande! bonita historia, me encanta el giro radical del último párrafo.

chicaburrida dijo...

¡Qué buena historia! No me esperaba para nada ese giro al final.

Mary Lovecraft dijo...

Todo un acto de valentía, sí señor :)

impresionante la fotografría con que ilustras la historia

¡un besete Yopo!

tejedora dijo...

Acabo de emocionarme bastante con tu escrito, porque me ha recordado a una persona que quiere dar un salto al vacío. Siempre estamos ahí unos cuantos para que lo evite y no piense en el pasado.
Menos mal que al final de tu escrito hay un párrafo (tal y como han denominado algunos que han opinado) lleno de esperanza.
Un abrazo.

Shinichi dijo...

Nunca dejaras de sorprenderme, simplemente genial, no se me ocurre nada mas.
sigue asi

un abrazo

Anónimo dijo...

Buen giro final, inesperado.
Así debe ser despertar de un coma, salir de un abismo en blanco y negro y volver a la vida.
Me gustó la descripción de la atmósfera.
Besos.

X dijo...

Me ha gustado mucho, aunque por supuesto me esperaba el final, demasiado bien nos conocemos ya. xDDD

Kane dijo...

Uy, esto de los giros argumentales... xD

Al principio, por alguna razón, los sentimientos me han recordado a los de aquella historia de Ángel que pusiste hace un tiempo.

Paula dijo...

Guau Yopo. Te estás superando. ;P
Aunque estaba deseando llegar al final para ver qué giro intentabas colarnos (porque sí me sospechaba que tenía truco) me sorprendiste gratamente con el que has escogido. Hermosa historia de esfuerzo, sí señor, aunque pienso en el síncope que le va a dar al pobre cuando se entere de que ha consumido unos años de su vida pudiendo haber saltado antes.
Besotes.

Ailën dijo...

¡Chapó!

El principio me recordaba a algo que escribí hace bastante tiempo...(por la idea, más que nada). Pero, ¡vaya con el giro final!

YoMisma dijo...

Sencillamente genial!

Muy bueno,
Saludos,
YoMisma

La Pequeña Candi dijo...

Un final muy sorprendente... me gusta mucho. Un buen salto, sí señor.
Un beso!

Jose dijo...

Im-presionante! Con cada relato te superas. Creo que, sin lugar a dudas, este es el que más me ha gustado.

Un abrazo!

Eva dijo...

Me uno a la opinión general, muy buena historia! Totalmente sorprendente el final, un gran paralelismo el que te has sacado de la manga, sobre la vuelta a la vida tras el coma. Te atreves con todo, eh? Pues hijo, no te podía haber quedado mejor!

Un saludo!

Lunaria dijo...

Juer, hoy estoy de una sensiblería que creeme si te digo que me he emocionado mucho mucho.
Besotes.

Zayi Hernández dijo...

me ha gustado...sobretodo me gustó que quisieras engañarnos...jajaja ;)... conmigo lo lograste, creí lo que querías que creyera...
Besitos.

bea dijo...

Hoolaaa!! Te escribo desde la playita, pero ya ves que ni en vacaciones dejo de visitarte, jiji.
Gran relato, el giro final es simplemente perfecto para rematar el ambiente que habías descrito.

1beso!

Anónimo dijo...

Muy logrado Yopopopopopolínnnnnnn!! jejeje, hasta el final no me esperaba nada de nada, me ha gustado un montón.

Un besazo.

Yopopolin dijo...

Buah, no merezco tantos halagos... una idea que tuve y la plasmé, nada mas...

Bienvenida Chicaburrida y Yomisma!!

X, tan bien nos conocemos?? pues yo pense que con este relato, ni tu ibas a descubrir el final!! jajaja

Yandros dijo...

Pues a mi también me ha gustado ese giro brusco, inesperado
La foto me recuerda al Púlpito, un acantilado de 600 m de caida libre en Stavanger, Noruega ¿puede ser?
Creo que se llama Preikestolen o algo asi
Un saludo!