17 de febrero de 2008

Expiación...


… o como un amor nace y muere el mismo día, la misma noche…

Hace unos días que pude ver esta película, que suena como una de las favoritas para alzarse con la preciada estatuilla en los Oscar 2008, (de hecho ya tiene el Golden globe) y la verdad es que es razonablemente buena.
Lo de “razonablemente”, lo digo porque el director es Joe Wright y su último film no me había gustado en exceso (era una adaptación más bien normalilla de la célebre Orgullo y prejuicio) y también lo digo porque la prota es Keira Knightley (si! la de piratas del Caribe, pero más delgada…) y es que tengo una especial aversión por esta actriz, que creo no me ha convencido, en ninguno de sus roles hasta el día de hoy. Dejando a un lado los prejuicios de los que partía, la peli no esta mal del todo.
Tengo que destacar la actuación del hasta ahora desconocido, James McAvoy, y que lo hace francamente bien; él es quien da la replica a la insulsa Keira… y también sublime la actuación de la niña mala de la película, Saoirse Ronan, otra actriz para mí desconocida, que soporta excepcionalmente la carga dramática de su personaje, y por el cual esta nominada al oscar.

Respecto al argumento, es esencialmente sobre un amor que no va a ser forjado nunca, debido a una grave acusación.
Cecilia (Keira Knightley) es una joven que vive en la Inglaterra pre-SecondWarWorld, en una familia acomodada. Tiene un hermano y una hermana, Briony (Saoirse Ronan), que es la va a causar todo el embrollo. El hijo del ama de llaves trabaja para ellos (James McAvoy), y está por los huesitos (y nunca mejor dicho) de Cecilia; su amor surge una noche de pasión en la biblioteca (si como lo cuento…) y Briony los pilla en situación indecorosa, lo que le da alas para pensar del chico como un obseso sexual que puede ser capaz de cualquier cosa, y al final le acusa de un acto que no cometió.
Luego el film se adentra en las terribles consecuencias que una mera equivocación puede motivar, y los esfuerzos de Briony por enmendar su error.
Lo mejor es ese final, ya en la época actual, donde se nos cuenta por fin la verdadera historia, la horrible verdad que desgraciadamente sí ocurrió, a pesar de lo bonito que hubiera sido poder vivir lo contrario.

En definitiva, altamente recomendable, ya no sólo por como un hecho casi irrisorio se convierte en el punto de inflexión de dos vidas, y de una tercera que tendrá que convivir con la culpa el resto de la suya, sino también por la fotografía, la ambientación, y las grandes interpretaciones de James McAvoy y de la sorprendente Saoirse Ronan. Le doy un 8.

1 comentario:

Anónimo dijo...

una muy buena pelicula, si señor.
muy mordaces los comentarios que haces en tu blog,y estoy de acuerdo contigo en tus criticas. Te lo dice una adicta al cine!

marta