3 de enero de 2015

Los viajes olvidados

Mis últimas andanzas viajeras de las que tenéis constancia fueron durante los primeros meses del año. Concretamente os hablé de la inesperada Polonia que surgió de la nada para convertirse en uno de mis destinos favoritos europeos. También os hablé de mi inminente visita a Ámsterdam, y a toda Holanda en general, gracias a una ruta a medida por los paisajes y ciudades más acogedores del país de los tulipanes.

No obstante, aún me quedan algunos viajes de los que hablar, los viajes olvidados de este 2014, los que aún no os he contado. Y es que al no estar al cien por cien con el blog, no me acuerdo de hacer los correspondientes resúmenes de los lugares visitados, y las pertinentes recomendaciones que luego siempre están muy bien cuando se viaja a dichos destinos.

Tras Holanda, el siguiente viaje que planeamos fue a Dublín. Como siempre, surgió un poco por las circunstancias, con la idea de ir a visitar a una amiga que iba a hacer un curso de inglés. El hecho de que Ryanair tenga allí su hub y los vuelos casi los regalen también tuvo mucho que ver. Y la verdad es que este corto pero intenso viaje a Irlanda mereció mucho la pena, puesto que no tenía grandes expectativas del país, y me sorprendió gratamente. Dublín no es una ciudad especialmente monumental, pero desde luego que es uno de los lugares donde más partido sacan a lo poco que tienen. Es una ciudad acogedora y con mucho ambiente, que vive de la Guinness y de los pubs irlandeses, una ciudad abierta, amable y divertida. Además, cuenta con algunos sitios de visita obligada como el Trinity College, cuya biblioteca es la más bonita que he visto nunca, te deja sin palabras. También tiene muchos museos para saber más de la historia de Dublín, para conocer el proceso de fabricación de la cerveza Guinness o del whiskey Jameson. Por no hablar de las catedrales y sus avenidas comerciales, entre otros atractivos.

Además, en este corto viaje pudimos descubrir también la Irlanda más verde. Contratamos una excursión de un día a los Acantilados de Moher, los mas famosos del país, que han sido el escenario de películas y series, por ejemplo de alguna de las de Harry Potter. Esta ruta guiada fue de lo que más nos gustó, porque además pudimos ver el castillo de Dunguaire que es el más fotografiado de Irlanda, y ver paisajes imposibles como los del parque nacional del Burren, que parece sacado de otro planeta. Sin duda fue la guinda perfecta de un pastel que nos supo muy bien a todos, incluido a mi amigo Shinichi, insigne bloguero, ingeniero y locutor, que también se apuntó a este viaje.

Después de Irlanda fui de nuevo a Alemania en diciembre, tras enamorarme el año pasado de Baviera en Navidad. Elegimos Bremen y Hamburgo como destino para hacer otra visita a una exiliada que vive allí. Pillamos días de frío pero no de nieve, y pudimos disfrutar a tope de lo especial de la Navidad en esta parte de Europa. Hamburgo y Bremen son dos ciudades muy distintas, una grande e industrial, otra pequeña y monumental, pero en ambas se vive el ambiente navideño de una manera increíble. Los músicos de Bremen estaban por todos lados, pero también las salchichas típicas alemanas que nos supieron a gloria, las ricas cervezas de la región, los puestos de comida callejera, las galletas de jengibre, y las luces que iluminan las ciudades en esta época como en ninguna otra. 


Mis viajes olvidados de este año han sido al mismo tiempo inolvidables. Sirvan estas pequeñas pinceladas para todos aquellos que deseen ir a estos lugares, pero si necesitáis más información no dudéis en contactar conmigo. Pronto tendréis más noticias mías en este aspecto, porque ya hay próximos destinos a la vista...

4 comentarios:

Luna Méndez dijo...

Alemania es tan <3 que me muero del gusto!

Y a Dublin le tengo ganas!! Yo sólo conozco la irlanda del norte!

Yopo viajador, qué año tan guay has tenido!

Yopopolin dijo...

Luna!! qué alegría verte por aquí... parece que vuelvo, o no... jiji. Ayyy, sí, ha sido un buen año viajero!! espero verte de nuevo por tu rinconcito y por este que tanto te quiere.
Saludetes!!

Shinichi dijo...

Ohh, insigne bloguero, me pones por las nubes, jajaja.
Hacemos pocos viajes, pero elegimos buenos sitios, hemos ido mejorando las visitas en cada viaje, o es cosa mia?
en cuanto se pueda, pues de nuevo a hacer las maletas, que tengo que amortizarla, jajaja

Luna Méndez dijo...

:)

Estoy intentando volver a la rutina poco a poco, a ver qué tal se me da!!!