La vida. La muerte. Dos conceptos tan opuestos y al mismo tiempo tan dependientes el uno del otro. ¿Qué sería de la vida si no tuviera un fin para hacerla única? ¿Qué sería del viaje si no supiéramos que tenemos un destino inquebrantable? Sería un camino sin fin, una ruta imperecedera que acabaría por desmoronar todo lo construído. El viaje de la vida es el descubrimiento del alma, la carretera por la que conducimos con el equipaje a la espalda, y viendo por el retrovisor a los que nos acompañan.
Ayer disfruté como nunca de la televisión, y hoy tenía que hablar de esto, porque terminé de ver una serie que ha conseguido remover mis entrañas, me ha hecho reflexionar y ha asentado los senderos para explorar mi interior. 'A dos metros bajo tierra' me ha cambiado. Desde hace unos tres meses me ha dado momentos inolvidables, con ella me he emocionado en cada capítulo, incluso creo que me ha hecho mejor ser humano. Pero los últimos minutos de la serie constituyen el final más bello de la historia de la televisión. Así, sin medias tintas. Es tan coherente, tan inesperado, tan redondo, que cuando el blanco se reflejó en mis retinas, un mar de lágrimas se desbordó por mis mejillas. Era felicidad.
Hoy soy un poco más feliz que ayer, y creo que es algo que ningún programa o serie de televisión había conseguido hasta ahora. Hoy soy más consciente de que hemos de disfrutar de nuestro viaje, poner en el reproductor la música que nos gusta, bajar la ventanilla, y respirar. El viaje de la vida comenzó hace muchos años, pero hoy sé hacia dónde nos lleva.
Ayer disfruté como nunca de la televisión, y hoy tenía que hablar de esto, porque terminé de ver una serie que ha conseguido remover mis entrañas, me ha hecho reflexionar y ha asentado los senderos para explorar mi interior. 'A dos metros bajo tierra' me ha cambiado. Desde hace unos tres meses me ha dado momentos inolvidables, con ella me he emocionado en cada capítulo, incluso creo que me ha hecho mejor ser humano. Pero los últimos minutos de la serie constituyen el final más bello de la historia de la televisión. Así, sin medias tintas. Es tan coherente, tan inesperado, tan redondo, que cuando el blanco se reflejó en mis retinas, un mar de lágrimas se desbordó por mis mejillas. Era felicidad.
Hoy soy un poco más feliz que ayer, y creo que es algo que ningún programa o serie de televisión había conseguido hasta ahora. Hoy soy más consciente de que hemos de disfrutar de nuestro viaje, poner en el reproductor la música que nos gusta, bajar la ventanilla, y respirar. El viaje de la vida comenzó hace muchos años, pero hoy sé hacia dónde nos lleva.
6 comentarios:
Qué una serie, película o libro te haga sentir así es la prueba de que, para ti, es una pura obra de arte. Me gusta que las personas, cada uno de nosotros, sea más feliz (un poco al menos, que en estos tiempos que corren, ya es mucho) gracias a cualquier tipo de arte.
Besos, Yopo!
La has acabado!!! Verdad que es maravillosa y dolorasamente humana? A mí ya te dije que es la serie que más me ha emocionado y me ha llegado. Cuando acabó me sentí más vacía que con cualquier final de temporada de otras series. La familia Ficher me había ido acompañando tanto tiempo y los había ido conociendo a todos con sus peculiaridades y con esos defectos que les hacían tan reales, que el choque fue muy brusco. No recuerdo haber llorado tanto tampoco con otra serie. Pero el momento flojera ya empezó con lo de Lisa... qué final con Nate y la pala!!! de todos modos para mí la escena más bella es ésta (http://www.youtube.com/watch?v=sgpYBj2Ix9E) cuando Ruth lo toca es como si la pantalla hueca del televisor desapareciera, como si todo fuera realidad pura... lo bueno de todo es que combina a la perfección ese humor negro con el drama
lo cierto es que más allá de si es buena, de si los personajes conectan contigo o no y todo eso, es que te hace reflexionar muchísimo. Y como tú dices, te hace pensar en la vida misma. Así de simple, como el mensaje que se sustrae de toda la serie en conjunto. Vivir, pese a lo malo, los fracasos y las frustraciones. Es un grito a la esperanza y a soñar despiertos.
Y bueno, me callo porque voy a empezar sino con un rollo demasiado "zen". Sólo diré, como Tequila, que lo más importante del arte es que nos mueva cosas por dentro, que nos haga sentir y querer buscar cosas nuevas
(Sí, era mi abuelo. Los recuerdos tan dulces y tan amargos a su vez.. me parece alucinante lo rápido que pasa el tiempo y como pese a ello hay cosas que se graban en la piel y en las retinas a cal y canto..)
Petons!
Me han entrado ganas de verla... Así, de repente.
Hombre, el único final que tiene la vida es la muerte, creo que eso lo sabías antes de ver la serie. xD Pero si te ha emocionado y te ha hecho feliz, ¿qué más puede esperarse de un producto audiovisual?
el único final que tiene la vida es la muerte, creo que eso lo sabías antes de ver la serie....
de todas maneras super recomendable
saludos
jajaja, no os quedéis con eso... claro que el final de la vida es la muerte, pero me refiero el viaje!
Viendo la serie he sido un poco más consciente de que el viaje es muy corto aunque nos parezca lo contrario.
Por cierto, al de la cirujía plástica: muy mal eso de copiar palabra por palabra el comentario anterior eh... xD
Saludos a todos!! :)
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